Beacon Update No Man’s Sky: lo mejor y lo peor de la expansión

La Beacon Update No Man’s Sky ha llegado como un meteorito digital cargado de ambición. Hello Games ha vuelto a hacer lo imposible: tomar una idea descomunal, embutirla en su ya de por sí sobrecargado universo procedural, y lanzarla sin mirar atrás. El resultado es una actualización que multiplica la profundidad del juego, pero también sus frustraciones. Y como jugador que ha vivido cada parche desde el lanzamiento desastroso de 2016, te lo digo claro: esto es una locura que amarás y odiarás al mismo tiempo.

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La Beacon Update es, sin rodeos, la actualización más ambiciosa desde NEXT. Y eso ya es decir mucho. Anunciada con un enfoque en la gestión de asentamientos, esta versión (5.7) permite al jugador tener el control simultáneo de hasta cuatro colonias en distintos planetas, incluyendo por primera vez a los misteriosos robots Autophage.

Pero no se trata solo de cantidad. Cada asentamiento viene con su propio árbol de producción, su arquitectura única, sus decisiones políticas, y hasta sus misiones de defensa contra piratas y sentinels. Todo esto se envuelve con mejoras gráficas, optimizaciones para Switch 2, y una nueva capa de personalización para NPCs y estructuras. Es decir: una actualización que convierte No Man’s Sky en un juego de gestión colonial con tintes de RPG moral.

Lo que la Beacon Update ha hecho es tomar la visión de un universo vivo y hacerla tangible. Y como era de esperarse con Hello Games, ha salido bien… pero no perfecto.

Tener cuatro asentamientos activos suena como un sueño hecho realidad. Y al principio, lo es. Recuerdo cuando descubrí que podía montar una base pirata en un planeta tóxico, mantener otra con Geks amigables en un paraíso floral, y gestionar un asentamiento robótico en una luna helada. Era como jugar SimCity pero con viajes interestelares entre cada sesión.

Saltaba entre planetas revisando informes, decidiendo construcciones, recolectando ingresos, y activando defensas. Estuve horas, literalmente horas, sin hacer otra cosa. La novedad era adictiva.

Pero la realidad se impone pronto: la gestión simultánea exige más atención de la que el sistema permite. Cada asentamiento requiere recursos específicos, y el sistema de inventario no está diseñado para esa escala. Acabas usando tres cargueros, una estación de refinado y un Excel mental para mantener el flujo de materiales.

Este sistema necesita una capa de automatización o al menos herramientas logísticas más inteligentes. Hoy por hoy, gestionar cuatro asentamientos no es como ser gobernador de una red galáctica. Es más bien como intentar manejar cuatro empresas sin empleados ni contabilidad automática. Un desafío inmersivo, pero agotador.

Si hay algo que emociona de Beacon Update es que por fin se hace justicia con los Autophage. Llevábamos mucho tiempo con ellos como una promesa apenas explorada. Ahora tienen asentamientos propios, arquitectura singular, terminales distintos, e incluso líneas de misiones únicas.

Cuando desbloqueé mi primer asentamiento Autophage, me encontré con un diseño helado y minimalista, frío como su lógica. Cada estructura parecía pensada por una IA. Y aunque la funcionalidad es similar a otros asentamientos, la ambientación y narrativa le dan un peso que hacía falta.

Lo mejor es que estas bases robóticas te exigen adaptarte: sus necesidades de energía, recursos, y decisiones son diferentes. No es solo un “reskin”. Hay un intento real por crear una subcultura dentro del juego.

Una de las grandes promesas de Beacon Update fue la personalización de los colonos. Ya no tienes NPCs genéricos que caminan sin rumbo. Ahora tienen nombres, biografías, roles, y hasta peticiones individuales. Y sí, es una mejora real.

En una de mis colonias, conocí a un comerciante corrupto que llevaba semanas desviando recursos. El juego me dio la opción de ejecutarlo o exiliarlo. Juro que me quedé diez minutos pensando qué hacer porque, de alguna manera, ya le tenía cariño. Eso es un logro narrativo, y hay que aplaudirlo.

Sin embargo, todo eso se viene abajo cuando ves que el mismo NPC que has personalizado con mimo decide plantar Gravitino Balls al lado del reactor nuclear. ¿En serio? La lógica de sus acciones no siempre acompaña su nueva “inteligencia”.

La IA, aunque más decorada, sigue tomando decisiones que carecen de sentido. Y eso, en un sistema donde tus elecciones importan, rompe la inmersión. Hello Games ha dado un paso enorme al humanizar a los NPCs, pero necesita urgentemente que esos ciudadanos no se comporten como imbéciles funcionales.

La inclusión de decisiones morales en los asentamientos es una de las joyas ocultas de esta actualización. Puedes aceptar o rechazar propuestas de ley, decidir el destino de ciudadanos problemáticos, e incluso configurar políticas económicas.

Estas decisiones afectan el desarrollo del asentamiento y, más importante, crean una conexión emocional con tu colonia. Me encontré en más de una ocasión paralizado, leyendo informes contradictorios, intentando decidir qué era mejor para el conjunto.

El problema es que, aunque el juego te presenta la ilusión de impacto, a veces las consecuencias se sienten superficiales. Es decir, puedes tomar decisiones drásticas sin que cambie gran cosa. Se nota que el sistema está en una etapa inicial.

Aun así, el simple hecho de que ahora haya decisiones que te hagan pensar —y sentir— es un paso en la dirección correcta.

Durante mucho tiempo, gestionar asentamientos era un proceso relajado, incluso aburrido. Beacon Update ha cambiado eso radicalmente con la inclusión de ataques piratas y sentinels.

Ahora, puedes estar organizando tu almacén o negociando con ciudadanos y de repente escuchar las alarmas. Las torretas activándose, los NPCs corriendo, las naves descendiendo desde el cielo… Es adrenalina pura. Me pillaron desprevenido más de una vez, y el susto fue tan real que sentí que mi colonia era mía de verdad.

Estos ataques no solo están bien implementados, sino que te obligan a tener una estrategia defensiva. Ya no basta con decorar tu base: necesitas planificar rutas, posiciones de ataque, y tener un escuadrón listo.

Una de las nuevas herramientas defensivas es el escuadrón asignado a cada asentamiento. Puedes equiparlos, asignarles roles, y confiarles tu seguridad. Sobre el papel, suena perfecto. En la práctica, es un poco caótico.

En algunos combates, vi a mi escuadrón actuar como un verdadero equipo: flanqueando enemigos, usando cobertura, y protegiendo la zona crítica. Pero en otros… los vi disparar al suelo o quedarse trabados en puertas. Otra vez, el problema de la IA vuelve a asomar.

Esto no significa que el sistema esté mal. Al contrario, añade una capa táctica al juego que hacía falta. Pero necesita un par de parches más para que sea tan fiable como prometedor.

Con cuatro asentamientos generando ingresos, uno pensaría que la economía estaría balanceada. Pero lo que ha pasado es justo lo contrario. Generar unidades (la moneda principal) se ha vuelto ridículamente fácil. En cambio, conseguir nanites sigue siendo un suplicio.

Y esto rompe la progresión. Puedes tener millones de unidades, pero si no tienes nanites, no puedes mejorar tus herramientas, naves o sistemas. Me encontré exportando recursos a montones, pero sin poder invertirlos en lo que de verdad me interesaba.

Hay formas de obtener nanites, claro, pero no se escalan con tu crecimiento económico. Hello Games necesita ajustar esta dualidad, o acabarás rico y frustrado.

Este desbalance no es nuevo, pero se siente más agudo ahora que tienes más responsabilidades. La Beacon Update multiplica tus opciones, pero no ajusta las recompensas en consecuencia.

Es como si te dieran cuatro granjas y solo una regadera. Puedes hacer mucho, pero el esfuerzo y el tiempo requerido no se ve reflejado en las recompensas. Eso genera una sensación de esfuerzo mal pagado, y puede desmotivar a jugadores menos obsesionados.

Jugar No Man’s Sky en multijugador siempre ha sido una experiencia inestable. Con Beacon Update, uno esperaría mejoras. Lamentablemente, no ha sido así. Los bugs de sincronización siguen ahí, más evidentes que nunca.

Intenté gestionar un asentamiento con un amigo y fue un desastre: él veía construcciones que yo no, yo aprobaba leyes que él no podía votar, y los NPCs se comportaban como si estuviéramos en dimensiones distintas. Es frustrante.

Para una actualización tan centrada en la gestión y la comunidad, no tener multijugador estable es un fallo grave. Es como construir una ciudad pero no dejar que tus amigos la visiten sin glitcharse.

Una de las grandes noticias fue la compatibilidad con Switch 2. Y lo cierto es que el rendimiento ha mejorado muchísimo. El juego corre a 1080p portátil, 1440p en dock, framerate estable, y carga más rápida.

Pero ni siquiera Switch 2 ha salvado al multijugador de sus fantasmas. Las mejoras técnicas son notables, pero los problemas de fondo siguen presentes. Esto no es una cuestión de hardware, sino de infraestructura del juego.

Aún así, ver este nivel de soporte en una portátil es impresionante. Y si Hello Games logra pulir el netcode, puede convertir la Switch en una de las mejores plataformas para jugar No Man’s Sky.

Beacon Update no es perfecta. Tiene errores, bugs, desbalances, y frustraciones. Pero también tiene alma, ambición, y un nivel de contenido que no se veía desde NEXT. Es una expansión que arriesga y acierta, aunque no siempre en la misma proporción.

Lo que Hello Games ha logrado aquí es admirable: transformar No Man’s Sky en una experiencia de construcción, gestión, y narrativa emergente que se siente fresca y viva. Cada asentamiento cuenta su propia historia, y cada jugador las vive de forma distinta.

Para mí, esta ha sido la actualización que más me ha hecho jugar en años. Con sus fallos, sí, pero también con momentos que recordaré siempre. Como esas sirenas piratas que me sacaron del trance mientras organizaba mi almacén. Como ese comerciante corrupto que casi me hizo llorar. O como el cuarto asentamiento donde ya ni sabía qué demonios estaba construyendo.

Para que Beacon Update sea la obra maestra que promete ser, necesita urgentemente:

• Mejoras en la IA de NPCs.
• Optimización en la gestión de inventario multiasentamiento.
• Rebalance de economía (especialmente nanites).
• Corrección de bugs de sincronización multijugador.
• Ampliación de consecuencias reales en decisiones morales.

Si Hello Games consigue eso, entonces sí: podremos decir que estamos jugando a la versión definitiva de No Man’s Sky.