Del verano desafiante al invierno implacable
Cuando My Summer Car irrumpió en nuestras vidas, redefinió el concepto de simulador. No era solo armar un coche: era una experiencia completa de supervivencia, torpeza mecánica y gestión humana ambientada en la Finlandia rural de los años 90. Ahora, años después, su esperada secuela, My Winter Car, se asoma en el horizonte con promesas de llevar todo eso… al gélido infierno blanco del invierno finlandés.
My Winter Car no es solo la continuación de un juego de culto, es la evolución extrema de un concepto que mezcla realismo abrumador, desafío mecánico, drama rural y supervivencia emocional. En este artículo descubrirás por qué este título tiene a toda la comunidad expectante, qué innovaciones trae, los coches confirmados y cómo se convertirá en el simulador definitivo de supervivencia automotriz.
¿Quieres más contenido como este? Visita nuestra sección de videojuegos pulsando el botón de abajo y no te pierdas lo último en Videojuegos.
Coches confirmados en My Winter Car
He utilizados imagenes de los coches reales de My Winter car y My Summer Car
He investigado a fondo las fuentes oficiales, foros y publicaciones del desarrollador para traerte información precisa sobre los vehículos que estarán presentes:
Corris Rivett (inspirado en Ford Taunus TC2, 1976)

- Coche proyecto principal: un coupé clásico que el jugador comprará como chasis desnudo y montará desde cero.
- Motor 2.0 con alto par y baja potencia; extremadamente pesado.
- Exige montaje preciso con múltiples variables mecánicas (alternadores, distribución, sistemas de escape).
Sorbett (compacto, años 80)

- Coche de uso diario con mantenimiento básico.
- Tracción delantera, motor a gasolina. Se rumorea una versión diésel.
- Equipa calefacción interior, limpiaparabrisas con chorros y arranque en frío.
Otros vehículos conocidos



- Jonnez ES: Es basicamente una Suzuki PV-50, este ciclomotor regresa como medio de transporte alternativo.
- Gifu o su reemplazo: Basado en un Sisu M162, este camión cisterna sirve para trabajos esporádicos.
- Fleetari’s car: Un Dodge Coronet, este es un vehículo clásico americano de los 60, si jugable pero presente.
Tráfico y entorno



- Nuevos modelos como Morris Marina, VW Golf, Buple y más.
- Algunos vehículos solo decorativos, otros podrían aparecer en eventos, accidentes o misiones.
Vehículo | Tipo | Estado |
---|---|---|
Corris Rivett | Coupé clásico (proyecto) | Montaje completo desde cero |
Sorbett | Hatchback utilitario | Disponible desde el inicio |
Jonnez ES | Motoneta/ciclomotor | Confirmado |
Gifu / reemplazo | Camión de servicios | Posible misión secundaria |
Fleetari’s car | Coche americano NPC | Presente como parte del mundo |
Otros (tráfico) | Morris, VW, Buple y más | Variados, algunos interactivos o estéticos |
¿Qué es My Winter Car y por qué todos lo esperan?
Para quienes no están al tanto, My Winter Car es la secuela oficial de My Summer Car, creada por el desarrollador finlandés Johannes Rojola (más conocido como ToplessGun). Se trata de un simulador de vida rural en Finlandia con un enfoque enfermizamente detallado en la mecánica automotriz… solo que esta vez ambientado en pleno invierno escandinavo.
El entusiasmo alrededor del juego no es casualidad. Desde 2020 los fans han estado ansiosos por novedades. La reciente apertura de wikis oficiales y la reactivación del sitio web confirmaron que el desarrollo está en marcha. Y no se trata de una simple expansión: este invierno cambia todo.
Una secuela de My Summer Car increíblemente realista: lo que promete esta continuación
El alma de My Summer Car sigue ahí: un entorno hostil, coches que requieren experiencia real para montarlos y una historia secundaria, sí, pero cargada de humanidad. Sin embargo, My Winter Car incorpora novedades que redefinen la jugabilidad:
- Simulación técnica extrema de todos los componentes.
- Invierno dinámico: temperaturas bajo cero, tormentas, noche eterna.
- Dificultad elevada: tendrás que sobrevivir con pocos recursos.
- Continuación directa de la historia del protagonista anterior.
Lo que me gustaría ver personalmente en My Winter Car
Como fanático de los coches, los detalles técnicos y los desafíos extremos, tengo grandes expectativas. Aquí van algunas ideas que me encantaría ver:
- Física avanzada del coche y motor: que los motores tengan problemas reales con el aceite frío, vapores, pérdida de compresión o detonación invernal.
- Ruidos mecánicos y fallas identificables: saber cuándo un rodamiento está fallando solo por el sonido.
- Sistema eléctrico detallado: que puedas revisar fusibles, limpiar terminales corroídas y mantener la batería cargada o reemplazarla.
- Exploración en trineo o moto de nieve: genial para moverse cuando el coche no responde.
- Pistas congeladas opcionales: caminos rurales, lagos helados con riesgo de romperse si llevas demasiado peso.
- Gestión del combustible realista: mezcla aceite-gasolina en motos, aditivos anticongelantes, consumo excesivo por clima.
- Fallos espontáneos por el clima: desde bujías congeladas hasta radiadores que revientan.
- Conducción con físicas mejoradas: derrapes realistas, pérdida de tracción, subviraje al frenar en nieve, respuesta según neumáticos, presión de inflado, y suspensión ajustable.
Cada uno de estos detalles aumentaría exponencialmente la inmersión y el valor de rejugabilidad. Poder montar tu coche desde cero, afinarlo, ver cómo responde al clima, todo eso ya es un sueño en My Summer Car, pero ahora se podría elevar a un nuevo nivel.
Interacción con el entorno y personajes no jugables (NPCs)
Uno de los aspectos más entrañables y absurdos de My Summer Car eran sus personajes secundarios: desde el mecánico cascarrabias hasta los borrachos del bar o el conductor del autobús. En My Winter Car, se espera una mayor profundidad en las interacciones sociales: vecinos aislados, comerciantes con horarios limitados por el clima o misiones que dependen de cómo te relaciones con otros habitantes del pueblo.
La posibilidad de tener que ayudar a un personaje varado en la nieve, compartir calefacción o hacer trueques con recursos básicos podría agregar una capa emocional y estratégica al juego. Este tipo de interacción no solo refuerza el realismo, sino que hace que el mundo se sienta verdaderamente vivo… y despiadado.
El rol del sonido en la inmersión total
Uno de los aspectos más subestimados en los simuladores es el audio, pero en My Summer Car ya veíamos cómo cada sonido —desde un tornillo mal ajustado hasta el traqueteo de una válvula— contaba una historia. My Winter Car puede llevar eso más lejos: sonidos del motor ahogado por el frío, crujidos de la nieve bajo los neumáticos, el silbido del viento colándose por una ventana mal cerrada. Todo suma a esa sensación de estar atrapado en un mundo donde cada detalle importa.
La incorporación de un paisaje sonoro más detallado, con cambios según la hora del día o las condiciones meteorológicas, puede convertir cada momento en algo memorable. Imagina oír un gruñido del motor al arrancar a -20 °C y saber que eso significa que te queda poco tiempo antes de que algo se rompa…
La soledad del invierno: atmósfera y supervivencia emocional
Más allá de la mecánica y la simulación técnica, My Winter Car promete transmitir el aislamiento y la crudeza emocional de pasar un invierno solo en una zona rural. El silencio tras una tormenta, los días cortos, las noches eternas y la sensación de que el mundo se ha congelado a tu alrededor jugarán un papel clave.
Este tipo de ambientación no solo afectará la jugabilidad, sino también la inmersión psicológica. La rutina de arrancar el coche, calentar la casa, sobrevivir con pocos recursos y no ver a nadie por días puede ser tan agotadora como cualquier desafío mecánico. Y precisamente ahí está su fuerza: no se trata solo de sobrevivir físicamente, sino de resistir mentalmente.
Economía rural: trabajos sucios y negocios oscuros
Uno de los aspectos más memorables de My Summer Car era su sistema económico: realista, modesto y un poco desesperado. No trabajabas para hacerte rico, sino para sobrevivir. Todo indicaría que My Winter Car seguirá ese mismo camino… aunque con nuevos desafíos y un entorno aún más hostil.
En el juego original, ganabas dinero vaciando pozos sépticos, cortando leña, vendiendo licor ilegal (kilju), repartiendo folletos y ayudando a borrachos a llegar a casa. Cada tarea implicaba un esfuerzo real, herramientas específicas y un riesgo: desde quedarte atrapado en la nieve con un remolque de troncos, hasta que la policía te pare con kilju en el maletero.
Para My Winter Car, sería lógico que estos trabajos regresen, pero adaptados al clima invernal:
- Vaciado de fosas sépticas congeladas: usar el camión Gifu (o su reemplazo) en carreteras nevadas será un verdadero reto.
- Leña como fuente vital: no solo para vender, sino para mantener caliente tu propia casa.
- Kilju invernal: quizás más difícil de fermentar, pero aún más demandado por personajes que buscan calor de cualquier forma.
- Reparto en condiciones extremas: calles heladas, vehículos que no arrancan, rutas cerradas por tormentas.
- Nuevos encargos rurales: podría haber misiones de ayuda vecinal, entrega de combustible, o incluso remolques con tractor para rescatar coches atrapados.
Este enfoque no solo mantiene el espíritu del juego, sino que intensifica el vínculo entre el jugador y el entorno. No hay dinero fácil, y eso hace que cada centavo ganado tenga más valor… y que cada herramienta rota duela un poco más.
Necesidades básicas y supervivencia: ¿cómo no morir congelado?
Si My Summer Car ya exigía un equilibrio entre mecánica, supervivencia y autocuidado, My Winter Car promete llevar esas necesidades al límite. No solo tendrás que comer, beber, dormir y cuidar tu higiene, sino también combatir el frío constante, la humedad y el aislamiento invernal.
Lo que ya conocíamos:
En el juego original, debías gestionar variables como:
- Hambre y sed: resolvibles con comida comprada o hecha en casa, y cerveza (mucha cerveza).
- Fatiga: dormías en la cama o en un sofá aleatorio.
- Orina: había que aliviarse en cualquier rincón o baño.
- Higiene: ducharse era vital para evitar que la barra de suciedad se disparara.
¿Qué podemos esperar en My Winter Car?
Ahora que estamos en un entorno hostil, es lógico pensar que estas mecánicas se volverán más complejas y realistas:
- Temperatura corporal: el frío será tu mayor enemigo. Posiblemente haya una barra de calor que deberás mantener encendida con leña, calefacción del coche o ropa térmica.
- Humedad y enfermedades: mojarte en tormentas o caer en agua helada podría generar resfriados o hipotermia.
- Alimentación calórica: la comida no solo saciará el hambre, sino que ayudará a mantener la energía y temperatura.
- Fatiga más profunda: los días cortos, la poca luz solar y el agotamiento físico tendrán un mayor efecto psicológico.
- Soledad o depresión: estar aislado en el bosque, sin contacto humano, podría ser una mecánica psicológica que afecte tu rendimiento.
Mantener al personaje con vida será una tarea diaria. Encender la estufa, derretir nieve para beber, buscar comida entre tormentas o simplemente lograr dormir sin congelarse serán desafíos constantes. Y esto, sumado a un coche que no quiere arrancar, completará la experiencia de supervivencia total.
¿Estas preparado para el invierno?
My Winter Car no es solo una secuela. Es la evolución de una experiencia única que logró capturar la esencia de lo cotidiano en un entorno rural, desde la perspectiva de la mecánica automotriz. Si My Summer Car fue un curso intensivo de mecánica y paciencia, esta nueva entrega será un doctorado en supervivencia invernal brutal.
Con una comunidad apasionada, un enfoque obsesivo por los detalles y una ambientación tan fría como hostil, My Winter Car tiene el potencial de ser uno de los simuladores más inmersivos y desafiantes jamás creados.
¿Estás listo para enfrentarte al infierno blanco finlandés con una llave inglesa en la mano y sin garantía de que tu coche arranque al primer intento?
Visita nuestro blog pulsando el botón de abajo y no te pierdas nuestras ultimas entradas donde encontraras los mejores productos con unas ofertas increíbles.